Tu navegador web está a tu lado en cada lugar que vistas de la web. Entre otras cosas, sabe que has visto y cuando, te acompaña cuando visitas a tus amigos en las redes sociales, va contigo al banco, te ayuda a contratar tus vacaciones y te incita a que persigas tus “vicios” en Internet.
¿Pero cuanto confías en él?
Es un pregunta que hacemos a nuestros lectores de vez en cuando ya que en lo referente a los navegadores, la confianza es importante y complicada.
Nos fiamos mucho de los navegadores simplemente con usarlos. Esperamos que nos protejan de exploits, malware y phishing. Muchos también usamos plugins de terceros para librarnos de publicidad y scripts maliciosos (mientras que confiamos en el navegador para que nos proteja de plugins fraudulentos de terceros con sus propios anuncios, trackers y scripts maliciosos).
El problema es que las únicas empresas que se pueden permitir producir gratuitamente un software tan complejo y caro son en las que menos confiamos.
A juzgar por los comentos en nuestros blogs, muchos creen que Google es prácticamente el demonio, Microsoft no se ha recuperado desde los 90s, Mozilla se ha vendido al dinero de los anuncios de Google, el esplendor de Apple está desapareciendo y Tor no puede escaparse de sus origines militares.
Las características que buscamos en un navegador están definidas desde hace tiempo, por lo que durante la última década o más, han competido entre ellos basándose en la velocidad, privacidad y seguridad.
Desde nuestra última encuesta la gestión de los anuncios se ha unido a la lista, ya que la responsabilidad sobre la publicidad online ha comenzado a migrar de los plugins de terceros a los propios navegadores.
Brave, un navegador completamente nuevo, ha sido creado sobre la idea que puede filtrar la publicidad mala, no nos importa ver buenos anuncios. Naturalmente, Google Chrome, un navegador desarrollado por una empresa de publicidad, respalda esa idea de filtrar y no bloquear. Mientras tanto, Firefox ha anunciado planes para bloquear por defecto el seguimiento sobre el que basa la publicidad dirigida.
La amenaza sobre plugins maliciosos ha crecido considerablemente en los últimos años. Firefox y Chrome han tenido que eliminar plugins maliciosos de sus tiendas, mientras que Chrome pronto prohibirá conseguir extensiones fuera de la tienda oficial.
Hablemos de confianza
No existe un estudio científico o una forma objetiva de medir la seguridad del navegador. Es un tema basado en lo que sientes, y en quién y en qué estás dispuesto a confiar. La encuesta es una forma de medir la temperatura y provocar una discusión sobre qué actitudes tenemos ante el software que utilizamos y las empresas que lo fabrican.
Así que, aunque la encuesta dice simplemente “¿En qué navegador confías más?” nos gustaría saber más sobre lo que piensas de este tema por lo que te invitamos a que también dejes un comentario.
Puedes realizar la encuesta en la página de Poll Daddy.
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