A parte de Amazon, las entregas en dron son ya una realidad en las cárceles. Hay muchas cosas que los conspiradores del exterior pueden hacer con un dron: dejar caer móviles, cargadores, baterías, drogas, cuchillos, tarjetas de memoria, auriculares, sierras o incluso taladros.
También hay muchas maneras que estas entregas sean un fiasco: algunas veces chocan contra los muros, provocan peleas en el patio de la prisión o quedan atrapados en el alambre de espino.
Ahora tenemos otro contratiempo para la entrega por dron: los criminales no se dan cuenta de que el dron los está grabando. Porque, sorpresa, tiene cámara.
Como informa la BBC, han detenido a dos escoceses introduciendo droga (o por lo menos intentándolo) en la prisión de Perth, por grabarse accidentalmente mientras empaquetaban el cannabis en un dron.
La pareja, Paul Reilly de 32 años, y Michael Martin de 35, estaba intentado pasar contrabando al hermano de Martin que estaba cumpliendo condena en esa cárcel, pero erróneamente se grabaron a sí mismos cargando el dron con unos 3.400€ en drogas escondidas en un Huevo Kinder. Por si no estás familiarizado con estas golosinas, se trata de un huevo de chocolate que envuelve una capsula de plástico que contiene un juguete pequeño, en EEUU han estado prohibidos hasta 2017, debido a una ley de 1930 que no permitía golosinas que contuvieran objetos que pudieran provocar asfixia.
A parte de grabarse rellanado los huevos con píldoras blancas de hachís, Reilly y Martin también consiguieron grabar el número de la casa en la que vivían, además de su coche que estaba aparcado fuera.
La BBC informa que la policía los identifico gracias al vídeo que grabaron accidentalmente.
El fiscal John Malpass dijo al tribunal que a la una de la madrugada del 22 de septiembre de 2017, un oficial de la prisión estaba patrullando cuando escucho un zumbido sobre su cabeza.
El oficial no pudo descubrir nada en la oscuridad, pero mientras caminaba por el perímetro del muro, descubrió un dron en el suelo con un paquete envuelto en plástico a su lado… debajo de la ventana en la que el hermano de Martin estaba cumpliendo sentencia.
El policía cogió el dron estrellado, el paquete de droga y la cámara que este contenía, así como la tarjeta SD. Esta contenía un fichero de vídeo, en el que se veía a Reilly con guantes rellenando el Huevo Kinder con las pastillas de hachís. Además, aparecía Reilly y un tercer hombre sin identificar.
Sentenciaron Reilly a 33 meses de cárcel, mientras que a Martin le sentenciaron con un año.
Las cámaras hacen lo que tienen que hacer
En esta historia hay una lección que todos debemos aprender, tenemos que saber los dispositivos que tienen un cámara y los que no. Y por supuesto, cuando están grabando.
Paul Ducklin, de Sophos Naked Security, explicó que cualquier cosa que tenga una cámara te puede grabar:
Piensa en tu móvil, probablemente no tenga una si no dos cámaras. Cuándo tu móvil está encendido y cuándo las cámaras están grabando solo depende en parte de ti. La mayor parte del “ cuándo” depende de quién escribiera el firmware que incluye tu teléfono.
No te tiene porqué gustar que el mundo tecnológico sea de esta manera, pero tienes que ser consciente de ello.
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